El coche deportivo de referencia desde 1963 de la casa Porsche es el 911. Es un coche que aún se fabrica y en el que se ha visto una evolución constante en el tiempo y grandes mejoras, especialmente desde el punto de vista mecánico y con una línea acorde con los tiempos, pero siempre respetando el diseño familiar de la marca.
Presente en numerosas versiones, pasando del Cabrio al Turbo Coupé, es un 2 + 2 que siempre ha tenido como común denominador la deportividad y un brillante funcionamiento. La conducción de un supercoche, la potencia, pero también un gran confort, lo han convertido en el automóvil deportivo ideal durante décadas.