El habitáculo es confortable y los asientos mullidos y cómodos para viajes relajantes. Bajo el capó reside un motor de 300 CV que permite alcanzar los 210 km/h. La combinación perfecta de elegancia y deportividad. Las prestaciones todoterreno también son increíbles; los caminos accidentados o sin asfaltar no serán un problema. ¡Nada te impedirá conducir el Range Rover Sport!